Antes de la operación de Bypass Gástrico pesaba 184 kg y era bastante complicado en todos los niveles. ¡Era un desastre! Sexualmente un desastre, solo comía, comí y comía, y era para lo único que vivía.

Se operó mi madre antes que yo, en julio, yo me operé en agosto y… ¡De maravilla! La verdad que me ha cambiado la vida pero al 100%.

Y ahora, después del bypass gástrico, pues puedo entrenar, puedo correr, puedo hacer de todo. Jugar con mis hijos, jugar a tenis, a frontón… Lo que me apetezca. Antes no… Antes no podía.

Tenía colesterol, triglicéridos, todo alto, el azúcar alto… Todo, todo. Ahora está casi todo estabilizado.